La casa del Espíritu Santo de Criação Velha fue construida en 1902, junto a la Iglesia de Nuestra Señora de los Dolores. Su fachada presenta una puerta con arco de medio punto, rematada por un frontón curvo con la inscripción de la fecha de su fundación, la corona del Espíritu Santo y un par de palomas.
Su proximidad a la plaza donde tienen lugar las festividades del Domingo de Pentecostés y del Lunes del Espíritu Santo permite su uso para el resguardo de las insignias, así como para la distribución de carne, pan y rosquillas.
Los cuatro tipos de masas típicas distribuidas en las festividades del Espíritu Santo en la isla de Pico son los bolos de víspera, los panes de agua, los bollos dulces y las rosquillas.
La devoción del pueblo tiene su origen en los momentos de profunda angustia causados por los desastres sísmicos que asolaron la isla, y en la continuidad de un culto traído desde el continente. Los habitantes invocaban la intervención divina como forma de apaciguar la naturaleza y encontrar consuelo.